Obteniendo una idea
El primer paso en la metodología de la investigación es conseguir un problema. Este puede ser un problema grande como (¿de qué manera podemos curar el cáncer?) o algo pequeño (¿cómo puedo llegar más rápido a la escuela o al trabajo?).
De acuerdo a (Ramírez, Felipe, S/F), “las ideas constituyen el acercamiento a la realidad que habrá que investigar”, y pueden obtenerse leyendo el periódico, viendo televisión, platicando con amigos, el internet, foros, revistas entre muchas otras.
Posteriormente debe definirse con más precisión. Por lo que se recomienda leer mucho sobre qué problemas existen y qué ya está hecho, así como hablar con profesionales del tema y buscar bibliografías entre otras.
¿Cómo sabemos si una idea vale la pena desarrollar? De acuerdo a Danhke (1989):
- La idea debe resultar interesante y atractiva para el investigador. Debe motivar a concluir la investigación.
- Las buenas ideas no tienen que ser nuevas, sino novedosas. Una idea vieja puede plantearse desde otro punto de vista o con una metodología diferente.
- Las buenas ideas deben servir para crear teorías o solucionar problemas. Esto es, deben producir un producto ya sea un artículo de investigación o un prototipo o nuevas preguntas.
Planteándola
Una de las secciones más importantes de la investigación ya que el planteamiento influirá en la metodología y los resultados que se obtengan. Puede llegar a ser complicado si se tiene poca información o es un problema muy nuevo, por ejemplo, ¿cómo podemos plantear un problema de computación cuántica si no sabemos de qué trata?
De acuerdo a Kerlinger (2002), existen 3 criterios para plantear el problema:
- El problema debe relacionar dos o más variables. Ej: ¿Es verdad que entre más gasolina entre a un motor más rápido se mueve? ¿Entre más temprano se levantan los alumnos más atención ponen en clase?
- El problema debe ser enunciado en forma clara y sin ambigüedades en forma de pregunta.
- El problema y sus variables deben ser medibles de alguna manera. Ej: El motor a gasolina puede medirse en base a su velocidad, consumo de gasolina, cantida de gas contaminante generado, etc. Los alumnos pueden ser evaluados en base a sus calificaciones, medir sus ondas cerebrales para detectar qué tanta atención tienen o qué tanto se mueven en su banco.
Listos para escribir
Ya que se ha pensado bien, debe escribirse (normalmente en una cuartilla) pasando por 4 fases:
- Detección del problema. Debe indicar cómo se detectó que existe un problema. ¿Fue porque lo leímos? ¿Porque no encontramos nadie que supiera como arreglarlo? ¿Porque había investigaciones que se contradicen?
- Elaboración del problema. Indicar qué se ha investigado con referencias de dónde sobre otras personas que hayan investigado el problema o problemas parecidos. Indicar en qué es diferente nuestro problema.
- Formulación del problema. Escribir qué es lo que quiere descubir (el problema) en modo de interrogante (pregunta) indicando las variables y método para obtener información.
- Evaluación del problema. Comprobar qué tan resolvible es el problema. Si no puede resolverse, debe ser descartado o replanteado.